ASTIC quiso dejar patente en un comunicado remitido el pasado martes su apoyo al cumplimiento de la legalidad europea y reconocer el derecho que asiste a los países miembros de la Unión Europea para legislar en contra de la competencia desleal, si bien alertaba contra la posible rigidez de las medidas a aplicar y un exceso de control a las empresas de transporte que no sean francesas.

ASTIC destaca la unidad de las autoridades francesas

Para la patronal española del transporte existe el riesgo de que esta medida pueda transformarse en una persecución más o menos descarada contra empresas competidoras de otros países, por lo que insta a las autoridades españolas y a la propia IRU a permanecer vigilantes ante la aplicación de esta instrucción.

La instrucción interdepartamental expedida a los prefectos franceses prevé que los controles persigan el cabotaje y el empleo ilegales y velen por el cumplimiento de las regulaciones relativas a tiempos de conducción y descanso, entre otras. El propio ministro francés advirtió que reforzará la eficacia de las normas que protegen a las empresas y trabajadores franceses y las sanciones administrativas para conseguir un efecto disuasorio.

ASTIC destaca también la coordinación y determinación existentes entre las autoridades francesas en la defensa del transporte de su país.