La base de contenedores Intercontainer continúa mejorando su dotación y servicio. Ahora acaba de incorporar a su equipo una nueva carretilla alquilada a Linde por un período de siete años, equipada con transmisión hidrostática. Esta carretilla elevadora permitirá la manipulación de contenedores vacíos hasta cinco alturas y, entre otras cosas, está equipada con aire acondicionado.

El delegado de Linde en Valencia, Ramón Payá (en el centro de la imagen), con los técnicos de Valencia y Barcelona que se encargarán del montaje de la máquina

La capacidad nominal de carga de la nueva máquina, de cuyo mantenimiento se encargará también Linde, es de 9.000 kilogramos, una capacidad que se mantiene hasta la máxima altura de elevación de la carretilla. Entre otras ventajas, cuenta con un mástil de gran visibilidad con guías de elevación invertidas, con una capacidad de elevación de 12,6 metros y una altura replegada de 9,28 metros. El conjunto del mástil está anclado directamente sobre el chasis de la máquina a través de casquillos de fricción absorbiéndose de forma prevista ls impactos que se producen durante la manipulación.

Dos instantáneas de la carretilla elevadora, que se está terminando de montar en las instalaciones de Intercontainer

En cuanto al chasis, es del tipo monobloque y está compuesto por perfiles de acero soldados entre sí, lo que ofrece una mayor resistencia y duración. Se encuentra totalmente cerrado de serie, de manera que permanece protegidos del polvo, la suciedad o la corrosión. El ancho de la máquina es de cuatro metros en la parte delantera y de 2,54 metros en la parte trasera.

La máquina está equipada con spreader telescópico ELME 588 ECH para contenedores vacíos de 20’ a 40’ con twistlocks verticales y sistemas de enclavamiento electrónico.

Uno de los elementos que diferencia esta carretilla de Linde de otras posicionadas en el mercado es que la compañía incorpora un sistema hidráulico innovador, que incluye frenado automático, rápida inversión de marcha, con doble pedal de Linde, y aceleración continua en cinco segundo, así como frenado homogéneo, con o sin carga, gracias al sensor de carga.