La sangría que padece el sector del transporte de mercancías por carretera desde que comenzó la crisis allá por 2008 parece no tener fin. Trimestre tras trimestre, las empresas transportistas van perdiendo poco a poco la carga con la que trabajaban en la época de bonanza. Si 2012 finalizó con unos niveles mínimos, 2013 no parece que vaya a ser mejor, a tenor de los datos hechos públicos ayer por el Ministerio de Fomento.

El sector del transporte de mercancías por carretera sigue pasando su particular ‘via crucis’

Según estos datos, en el primer trimestre del año se movieron por las carreteras españolas 269,45 millones de toneladas, lo que supone un 17,89% menos de lo contabilizado en el primer trimestre de 2012. Tanto el transporte nacional como el internacional registran descensos, rompiendo la tendencia de meses anteriores en los que las empresas encontraban en otros mercados algo de alivio. El movimiento de mercancías dentro de las fronteras españolas fue de 253,44 millones de toneladas, un 18,35% menos, mientras que el transporte internacional se redujo un 9,8%, con 16 millones de toneladas.

Por tipos de mercancías, el transporte de productos agrícolas y animales vivos sigue siendo el único nicho de mercado que crece, con 33,92 millones de toneladas, un 2,05% más. El movimiento de productos alimenticios y forrajes bajó un 14% en el primer trimestre, con algo más de 45,5 millones de toneladas. Por su parte, los productos petrolíferos experimentaron una ligera caída de punto y medio, con 13,65 millones de toneladas. El movimiento de minerales y materiales de construcción sigue siendo el mayoritario en las carreteras españolas, con 91,06 millones de toneladas, a pesar de su descenso del 28%. Asimismo, el tráfico de maquinaria, vehículos, objetos manufacturados y transacciones especiales llegó a los 50,73 millones de toneladas, seis puntos y medio menos que en el primer trimestre del pasado año.

Convenios
Como se ve, los datos exclusivamente del transporte de mercancías no ayudan a aclarar un panorama que en los últimos días ha estado aún más ensombrecido por las constantes convocatorias de huelga en varias provincias españolas, como Madrid, Barcelona, Tarragona y a las que próximamente podrían sumarse otras como Valencia.

Aunque es cierto que el acuerdo entre las partes y la consecución de pactos entre empresas y sindicatos ha propiciado que la mayoría de las convocatorias de movilizaciones hayan sido desconvocadas, la ruptura de las negociaciones a nivel nacional ha provocado un marco de alta inestabilidad. De hecho, la Asociación de Transporte Internacional por Carretera, ASTIC, hacía notar hace unos días la idoneidad de contar con un Convenio Colectivo de Transporte por Carretera a nivel nacional, ya que “la existencia de docenas de convenios colectivos distintos dificulta un posible acuerdo entre sindicatos y empresas del sector”, y solicitaba a los agentes negociadores “un esfuerzo conjunto para consensuar un convenio marco nacional que beneficie a todas las partes”.

Desde UGT, Emilio Cardero, responsable del Sector de Carretera, no ve con desagrado esta idea. “Deberíamos ser capaces de hablar y ampliar el Acuerdo General de Mercancías, sacar cuatro puntos de acuerdo y a partir de ahí comenzar a hablar de las particularidades de cada subsector”. El principal problema es que con el actual Acuerdo General no pueden negociarse las tablas salariales a nivel general.

A la problemática de las relaciones laborales habría que sumar los problemas estructurales que viene arrastrando el sector. Desde 2008, según la CETM, han desaparecido unas 22.000 empresas de transporte de mercancías por carretera. Esta ‘sangría’ se produce por la conjunción de unos elevados costes fijos (entre los que hay que destacar el del combustible); un alto nivel de endeudamiento, que en ocasiones representa más de 65% del pasivo de muchas empresas; y unos bajos ingresos, provocados por la caída de la actividad y por el alto grado de morosidad que sufren las empresas, que según el Observatorio de Morosidad elaborado por Fenadismer llegaría a superar los 80 días de pago por los servicios de transporte.

El sector se acerca cada vez más a la huelga
Hoy finaliza el plazo dado por los sindicatos y trabajadores del sector del transporte de mercancías por carretera de Valencia para retomar las negociaciones sobre el Convenio Colectivo. Al cierre de esta edición, la situación seguía como hasta ahora, con las negociaciones rotas.

Aurelio Sánchez, de UGT, reconocía ayer a esta publicación que no ha habido movimientos desde el 17 de mayo, cuando se produjo la concentración frente a la sede de la Federación Valenciana de Empresarios Transportistas. “La semana que viene, si no hay cambios de última hora, comenzaremos a trabajar ya sobre un escenario de huelga”, reconoce Sánchez.

Según los datos hechos públicos en el día de ayer por el Ministerio de Fomento, en el primer trimestre las empresas de transporte de mercancías por carretera de la Comunidad Valenciana transportaron 44,88 millones de toneladas, lo que supone un 9% menos.