Los puertos de interés general de la Comunidad Valenciana estarán conectados al tercer hilo en el año 2016. Así lo confirmó la pasada semana en Castellón el director de Logística y Transporte de la Generalitat Valenciana, Carlos Eleno. Según el proyecto presentado por el Consell al Ministerio de Fomento, y que tanto ha convencido al entorno de Ana Pastor, los puertos de Castellón, Sagunto y Valencia quedarían conectados en 2015, mientras que el puerto de Alicante lo estaría un año después.

Los puertos valencianos contarán con conexión hasta Francia en el año 2016

A pesar de que la Comisión Europea aprobó el pasado año la inclusión del Corredor Mediterráneo en la Red Transeuropea, queda claro que los plazos de ejecución y la dotación presupuestaria conforma un proyecto ejecutable a muy largo plazo. Por ello, la puesta en marcha del tercer carril podría suplir hasta entonces la falta de esa infraestructura. Y es que la puesta en marcha de ese tercer carril se haría sobre una plataforma ya construída, cosa que reduciría su coste a 2,2 millones de euros por kilómetro y acortaría los plazos de ejecución.

Según los cálculos hechos por la Generalitat Valenciana, el proyecto que prepara INECO podría estar finalizado este año. En 2013 se podría proceder a la licitación de las obras y entre 2014 y 2015 éstas ya habrían llegado a los puertos de Castellón y Valencia. Un año más tarde lo haría hasta Alicante. En total requeriría una inversión de 1.230 millones de euros.

La fase constructiva se divide en cuatro fases. La primera de ellas, de 170 kilómetros, ya está en servicio, y es el tramo que une la frontera francesa con la localidad de Castellbisbal, muy cercana al puerto de Barcelona. La segunda fase, que uniría los 210 kilómetros que hay entre Castellbisbal y Vinarós, costará unos 525 millones de euros, y conectaría el puerto de Tarragona a la red ferroviaria.

El tercer tramo ya comprendería a los puertos de Castellón, Sagunto y Valencia, y uniría las localidades de Vinarós y Almussafes. Estaría finalizado en 2015 y necesitaría de una inversión de 467 millones de euros. Asimismo, llegaría a las factorías de Ford en Almussafes y a la de Vossloh en Albuixech. El cuarto y último tramo llegaría hasta el puerto de Alicante y estaría listo en el año 2016. Requería una inversión de unos 238 millones de euros para cubrir los 170 kilómetros.