La tercera edición de los Premios Fundación Valenciaport, que se fallaron recientemente y que está previsto que se entreguen el próximo 28 de octubre, ha premiado el estudio “Despliegue del plan estratégico de la Autoridad Portuaria de Valencia: El uso del cuadro de mando integral como modelo de gestión” de José Antonio Aparisi y Vicente Ripoll Feliu, como mejor investigación en transporte y logística.

Para conocer más detalles de este trabajo premiado, Valencia Marítima ha querido contactar con estos dos profesores de la Universidad de Valencia y conocer así su aportación al puerto de Valencia.

CMI
El exhaustivo trabajo de Ripoll y Aparisi se ha basado en el estudio e implantación del Cuadro de Mando Integral (CMI), es decir, una herramienta que permite la gestión y control de las estrategias de una organización, en este caso, de la Autoridad Portuaria.

Fue en 2002 cuando la Autoridad Portuaria presentó su Plan Estratégico 2002-2015 en el que se reflejaban algunas de las líneas maestras previstas, pero, en 2003, la dirección consideró que todos los objetivos “no se estaban cumpliendo a la perfección”, tal como señalan Ripoll y Aparisi, “así fue como se gestó la necesidad de una herramienta como el CMI, que, con el tiempo, se ha hecho realidad y ha superado, ampliamente, las previsiones iniciales”, explican.

De hecho, en dicho plan, la AP pretendía alcanzar, en 2015, los 4 millones de TEU’s y 68 millones de toneladas, “y, a pesar de decir esto con prudencia, viendo la evolución, en 2011-2012 estas previsiones ya se habrán cumplido. Es por ello que consideramos que el Cuadro de
Mando Integral es beneficioso para cualquier organización, es un instrumento clave hoy en día, porque permite buenos resultados y coherencia”, explica Aparisi.

Los dos premiados coinciden en destacar el puerto de Valencia como “empresa dinámica” porque “ha dado grandes pasos en su gestión, desde la informatización sobre los atraques o desatraques de buques; la implantación de la Marca de Garantía, algo que es pionero el puerto y que favorece el gran comercio internacional; la apuesta por favorecer el turismo crucerístico o la mejora continua de las infraestructuras y de los accesos al recinto portuario”.

Medioambiente
El CMI planteado por estos dos profesores universitarios tiene 8 grandes líneas de trabajo, tanto en su diseño teórico como su puesta en práctica, que corresponde a todos aquellos que componen la comunidad portuaria, y una de ellas es la del respecto al medioambiente llamada “Integración con el entorno”. Asuntos como la contaminación atmoférica o acústica, aguas residuales o posibles derrames de líquidos tóxicos... se contemplan en esta estrategia de grandes dimensiones que está beneficiando el puerto valenciano.