Las dos mayores empresas navieras de Rusia, Sovkomflot y Novoship, preparan su fusión para crear una de las compañías más importantes en el transporte de petróleo y poder competir a escala internacional, según el vicepresidente del comité de Energía y Transporte del parlamento rusa, Serguéi Shishkariov.

“Con la fusión de Sovkomflot y Novoship, Rusia obtiene una gran compañía de transporte y se convierte en uno de los líderes mundiales en todas las fases de la exportación de petróleo y de sus derivados”, apuntó.

La futura compañía dispondrá de una flota de más de un centenar de buques cisterna para el transporte de petróleo y gas licuado.

La empresa, que será controlada por el Estado ruso, moverá ocho millones de toneladas de carga anuales.

Sovkomflot, que es de titularidad pública, dispone de 56 barcos petroleros, parte de ellos destinados para operar en las aguas gélidas del Ártico y el mar Báltico y mueve cada año 4,36 millones de toneladas de carga.

Por su parte, los accionistas de Novoship son la Agencia Estatal de Patrimonio, el Fondo Federal de Bienes Nacionales e Intrigue Shiping.

El gobierno ruso también ha decidido integrar en un mismo consorcio los principales astilleros y oficinas de diseño de buques del país, para poder competir en el mercado mundial.