El desafío sueco de la 32ª America’s Cup, Victory Challenge, acaba de volver de Dubai y lo primero que ha hecho ha sido presentar su nuevo SWE 96. El acto fue pequeño y sólo han asistido los medios de comunicación y miembros del equipo junto a sus familias. Inmediatamente lo someterán a las primeras pruebas estructurales.

“Este barco representa sangre, sudor y lágrimas”, ha afirmó el patrón del equipo, Magnus Holmberg, en un improvisado discurso. “Sé que todos habéis trabajado muy duro para conseguir esta espectacular máquina. Todos en la tripulación hemos aportado algo, pero es ahora cuando tenemos que dar un paso más y sacarle lo máximo al barco. Tenemos mucha responsabilidad y estamos ansiosos por hacerlo”.

El SWE 96 ha sido amadrinado por Kristina Anker, esposa de Johan Stenman, presidente de Victory Challenge, que bendijo el barco antes de estrellar una botella de champagne contra su proa. Minutos después, el SWE 96 tocaba el agua por primera vez.

El diseñador del equipo, Mani Frers, ha afirmado que el barco es el resultado de horas de investigación y desarrollo, y sonriente ha asegurado que es un barco “muy rápido”.

“Con una campaña de un solo barco teníamos que hacer algo diferente. Es un barco potente y
creo que será fácil de maniobrar. Es un barco de Match-Race”, afirmó el diseñador.

Santiago Lange, estratega del equipo, afirmó entre risas que esperaba que el “toro se coma al torero”, en una clara referencia a la rivalidad entre su equipo y el Desafío Español 2007.

En poco más de dos meses comienza la Louis Vuitton Cup, la hora de la verdad.