El Gobierno italiano ha aprobado las líneas generales de un proyecto de reforma del transporte aéreo nacional para crear mejores condiciones de mercado que favorezcan su desarrollo.

La formulación de este plan es una de las dos líneas de actuación decididas por el Gobierno para superar la situación de crisis de la aerolínea Alitalia y se realiza después de la decisión de vender una cuota del capital de la aerolínea no inferior al 30,1%.

El transporte aéreo italiano, que es un recurso “fundamental” del país, vive “en una condición de extrema fragilidad”, por lo que su reorganización constituye “una condición esencial” para su desarrollo, según el documento.

El proyecto señala como principios generales la puesta en primera fila del interés general del país respecto a los “sectoriales y locales”, así como la recuperación de un “papel activo” del Gobierno, cuya acción es “necesaria para asegurar la funcionalidad y calidad para la movilidad de pasajeros y mercancías”. Entre las acciones concretas, se propone un plan de aeropuertos para “garantizar un desarrollo ordenado y coordinado” del sistema nacional y mejorar la calidad del servicio.

De igual forma, se pretende potenciar los sistemas de control con una redefinición del papel del Ente Nacional para la Aviación Civil (Enac) y del resto de los actores del sector. El plan también contempla adoptar acciones para mejorar y hacer más transparente la gestión de los permisos de aterrizaje y despegue (slots).