La presidenta del Consorcio Valencia 2007 y alcaldesa de Valencia, rita Barberá, presentó esta semana en Venecia el concurso internacional para desarrollar la Marina Real Juan carlos I, un proyecto que ha sido calificado por el propio presidente de la Unión Internacional de Arquitectos, Gian Carlo Ius, como “La más importante competición arquitectónica a nivel mundial en estos momentos”.

La alcaldesa se desplazó hasta Venecia par presentar este concurso a nivel mundial, en el marco de la Bienal de Arquitectura que acoge la ciudad italiana. Cuatro renombrados arquitectos formarán parte del jurado, intetrado por siete personas, que elegirán, entre todos los proyectos a concurso, el más idóneo para Valencia. Se trata del profesional holandés Donald Lambert, el brasileño Jaime Lerner, el español Joan Busquets, y la griega Rayna Klontsinloti. El jurado estará presidido por la alcaldesa, por lo que sólo quedan por designar los representantes del Gobierno español y el autonómico.

El próximo 31 de este mes concluye el plazo de inscripción para los profesionales y equipos interesados en formar parte en el concurso. Una vez cerrada la inscripción, se abrirá un nuevo plazo para la presentación de los originales, que concluirá el 8 de febrero de 2007. Finalmente, el jurado estudiará detenidamente todas las propuestas y anunciará su decisión de 2 de marzo.

La presidenta del Consorcio aseguró que ésta es una gran oportunidad para la ciudad. “La propia evolución de Valencia implica que impulsemos proyectos como éste, de gran envergadura, que sean conocidos fuera de nuestras fronteras”. En este sentido, Barberá destacó la importancia de dar a conocer este concurso “en el corazón mismo de la arquitectura mundial, la Bienal de Venecia”. El Palacio Zorzi de Venecia, sede de la UNESCO en la ciudad, ha sido el marco elegido para presentar esta convocatoria especializada.

La alcaldesa continuó exponiendo las claves de esta actualización urbanística. “La Marina Real Juan Carlos I permitirá transformar una de las zonas emblemáticas de la ciudad, mediante su apertura al mar”. Rita Barberá expresó así su deseo de que a este concurso internacional “vengan los mejores profesionales y traigan los mejores proyectos para la mejor marina”.

Zona
La actuación prevista para la adecuación de la Marina afectará a 1.350.000 metros cuadrados, que incluyen 340.000 metros cuadrados del Programa de Actuación Integrada (PAI) de El Grao, que se han incorporado a la operación para hacerla más armónica. Precisamente en este ámbito se podría construir viviendas, aunque Barberá ha dejado claro que por el momento “esperamos ideas, es un concurso muy abierto a las propuestas de los mejores paisajistas, urbanistas y arquitectos del mundo”.

La dotación económica para los proyectos elegidos será de 150.000 euros, 100.000 euros y 50.000 euros, al margen de tres menciones honoríficas para soluciones parciales, galardonadas con 20.000 euros cada una.

Según Barberá se apuesta por crear una fachada portuaria, ampliar y ordenar el frente litoral, integrar la dársena del puerto y la nueva marina en la ciudad, ordenar el sector de El Grao, separar los usos portuarios de los ciudadanos, ordenar la circulación y el transporte, resolver la llegada del antiguo cauce del rio al mar, recuperar los edificios de valor patrimonial e histórico como los tinglados, el Edificio del Reloj y el edificio de Aduanas, y por último, hacer compatibles los usos públicos y privados, residenciales, terciarios y de equipamiento.

Usos
Asimismo, el Consorcio realiza una serie de recomendaciones, como eliminar los obstáculos que impidan la vertebración puerto/ciudad, como la valla existente. Igualmente se apuesta por hacer accesible toda la zona de astilleros, en el Muelle de Poniente, así como la zona sur, con la nueva marina.

En cuanto a los posibles usos de la marina, el residencial, por el momento se establece en el PAI de El Grao, según los parámetros establecidos en el Plan General de Ordenación Urbana.

Al margen de esta zona, queda a criterio de los concursantes la propuesta del uso residencial, siempre sometido a aquello que marca la Ley de Puertos. Tal como manifestó en su día el ministro de Administraciones Públicas y vicepresidente primero del Consorcio, Jordi Sevilla, el Gobierno no tiene voluntad de desafectar los terrenos portuarios, de titularidad pública, para construir viviendas, por lo que por el momento no se contempla el uso residencial al margen del PAI de El Grao. En cuanto al suelo dotacional, se contempla una reserva de suelo destinado al desarrollo de espacios empresariales para los sectores del conocimiento y las nuevas tecnologías, al tiempo que se prevé la ubicación de la Escuela Municipal de Vela y equipamientos culturales como motores de regeneración urbana en materia de diseño, moda y museística. También se han previsto usos terciarios y portuarios con actividad internacional vinculada a la portuaria, así como uso comercial minorista, ocio, restauración, oferta turística, uso hotelero y actividades náuticas. Otra de las propuestas pasa por la construcción de un equipamiento dedicado a la restauración y mantenimiento de embarcaciones durante el invierno. Zonas verdes y espacios libres contemplan los usos de una marina, en la que son totalmente incompatibles el almacenaje, el comercio mayorista o el agrícola.