Ayer tuvo lugar en ADEIT un seminario organizado por la Fundación Valenciaport para informar a los medios de comunicación en qué consiste la próxima ampliación del puerto de Valencia.

Una primera sesión que espera tener continuación para resolver las dudas que surjan a los profesionales de la información sobre el funcionamiento del puerto de Valencia. Así Manuel Guerra, responsable del Departamento de Planificación de Infraestructuras e Integración Territorial de la Autoridad Portuaria de Valencia; y Leandro García, director de la Fundación Valenciaport, con la colaboración de Daniel García, responsable de Relaciones Externas del puerto; resolvieron todas las dudas respecto a la próxima ampliación del puerto de Valencia que solucionará los problemas de espacio que comenzarán a ser patentes en 2010.

Una ampliación necesaria, según informó ayer Manuel Guerra, no sólo para el hinterland del puerto, sino también para el conjunto de la economía valenciana que obtiene tantos beneficios del puerto como de algunos de los sectores productivos tradicionales como el del juguete, y que perdería más de un millón de euros anuales sin esta ampliación de infraestructuras.

Leandro García se ocupó de la parte económica de esta ampliación, así destacó que en la actualidad la existencia del puerto da trabajo a 14.000 personas, de él se obtiene un valor añadido de 557 millones de euros al año.

Manuel Guerra también se refirió a la sostenibilidad de esta ampliación destacando que éste ha sido un criterio dominante a la hora de elegir esta alternativa de ampliación, ya que es la más sostenible de las que se barajaban, aun teniendo en cuenta que a lo mejor no es la más rentable respecto a los intereses del puerto.

Estos dos profesionales destacaron la importancia del puerto no desde un fin en sí mismo sino desde el medio para seguir creciendo económicamente al servicio de la Comunidad Valenciana y su hinterland que supera las fronteras autonómicas y nacionales, con beneficiarios director, indirectos e inducidos.

Esta ampliación está pendiente de la Declaración de Impacto Ambiental que tendrá que decidir el Ministerio de Medio Ambiente, se supone que antes de que termine este año 2006 y según las previsiones antes del próximo verano podrían estar en marcha las obras de ampliación de la zona norte del puerto de Valencia. Un puerto que se dedicará en un futuro al transporte interoceánico, preferentemente de contenedores, automóviles y cruceros; especializando al puerto de Sagunto en el resto de tráficos, tales como los graneles o automóviles, aunque sin descargar los tráficos de contenedores dependientes del short sea shipping.

En el seminario de ayer también se habló de intermodalidad, para lo cual se destacó que el puerto de Valencia es el mejor preparado para las conexiones por ferrocarril con los nuevos accesos que ya están operativos y que lo conectan directamente con las red viaria nacional.

Una ampliación a la que la APV aportará 530 millones de euros y que ayer se explicó de una claridad meridiana. Con estas obras que se perfilan como las últimas de ampliación de este puerto se espera conseguir unos resultados más que positivos, tales como el movimiento de 65 millones de toneladas y cuatro millones de TEUs. Así se construirán 5.556 metros de longitud de diques, 2.100 metros de longitud atracable, otros tantos en muelles y153 hectáreas de explanadas.

Respecto al tráfico de cruceros, que beneficia principalmente a la ciudad de Valencia, según los planes de la Autoridad Portuaria se establecerá entre el muelle de transversales, Poniente y parte del de Levante, pudiéndose trasladar a la ampliación en caso de requerir ampliar la superficie de atraque para este tráfico, para el que incluso se ha previsto la creación de una nueva estación marítima si la demanda lo requiriese.

La frase ya muerta de que Valencia vive de espaldas al mar, fue enterrada ayer con este seminario que será el primero de muchos otros cuyo fin último es informar.