Fuentes de Transcont consultadas por este diario afirmaron en la jornada de ayer que, desde la puesta en funcionamiento del sistema informático CATOS, se han desviado al puerto de Barcelona alrededor de 20.000 TEUs.

Como muestra de ejemplo, y siempre según estas asociaciones, durante las dos primeras semanas de vigencia de este nuevo modelo operativo (del cuatro al 18 de marzo) se desviaron a la ciudad condal 5.400 TEUs.

Casi desde instante, transportistas y representantes de Marítima Valenciana y la Autoridad Portuaria de Valencia mantuvieron encuentros para intentar arreglar la situación, ya que se comenzaban a detectar quejas de los transportistas a la entrada de la terminal por los largos tiempos de espera que provocaban “retenciones interminables”, según palabras de algunos camioneros.

El penúltimo movimiento llegó de las mismas organizaciones de transportistas, que la semana pasada enviaban un comunicado para convocar los paros de sus asociados, que comprenderían la última semana de marzo y la primera de abril.

Comisión de seguimiento
Al día siguiente se reunía la Comisión de Seguimiento del Transporte del puerto de Valencia, donde se escenificó la ruptura de relaciones entre los transportistas, por un lado, y Marítima Valenciana y la Autoridad Portuaria de Valencia, por otro. Al comienzo de la reunión, los transportistas se levantaron de la mesa acusando a sus interlocutores de “habernos descalificado para participar en la reunión al llamarnos -a los transportistas- grupo de presión, en alusión al comunicado anterior”.

A lo largo del pasado sábado se mantuvieron ciertos encuentros, a instancias de la Autoridad Portuaria de Valencia, para intentar desbloquear la situación, aunque los encuentros no surtieron el efecto esperado y, en el día de ayer, los transportistas de contenedores del puerto de Valencia (ELTC, Transcont y AIT) no operaron en Marítima Valenciana.

En estos momentos, la posición de los transportistas se ha suavizado un poco, ya que, además de hacer ver la transcendencia del problema, demandan que Marítima Valenciana les abone la primera semana de las cuotas de la Seguridad Social desde que el sistema CATOS se implantó.

Apelar a la sensatez
Sin embargo, la misma Comisión de Seguimiento del Transporte del puerto de Valencia acordó en su reunión del pasado viernes seguir apostando por el diálogo y los instrumentos de negociación (como la misma Comisión de Seguimiento del Transporte) y “censurar la actitud del representante del sector del transporte por abandonar la Comisión”, además de “considerar fuera de lugar el comunicado de las medidas de fuerza de las asociaciones del transporte”.

Asimismo, la Autoridad Portuaria advertía la pasada semana que “de llevar a cabo las medidas de fuerza anunciadas, el daño que se produciría en el comercio exterior sería todavía superior”.

A pesar de todo, desde la APV se hace un llamamiento a la sensatez a todas las empresas de transporte y trabajadores autónomos para que reconduzcan la situación, eviten la adopción de medidas de fuerza y “vuelvan a la Comisión de Seguimiento del Transporte para debatir serenamente los problemas y negociar soluciones sin adoptar medidas de fuerza”.

El paro afectará, hasta el domingo, a Marítima Valenciana y no a Terminales del Turia o TCV.

Según los datos de 2005 que maneja la APV, Marítima Valenciana recibió el 69,51% de los 2,4 millones de contenedores que se movieron en el puerto de Valencia el año pasado.

En ese sentido, la situación es que los buques descargan los contenedores con mercancías en la terminal, pero los transportistas no las trasladan a sus destinos. Así, los contenedores que se descargan de los barcos desde las ocho de la mañana de ayer permanecen en la terminal, mientras que la mercancía que debe ser cargada en los buques ya había sido depositada en Marítima Valenciana.