Pero el interés que persiguen es exclusivamente el de su propio beneficio y lucro personal. Es el interés en que exista un orden que les permita seguir rapiñando y en que se desarrollo una supuesta libre competencia para mantener el abuso y sobre aquel que cada día depende de una orden de transporte que le permita subsistir.

Ellos, en su bondad infinita, en su honestidad sin límite, han descubierto que la mayoría de los que trabajan en la actividad del transporte, los que únicamente intentan defender la dignidad de su actividad y el derecho a la subsistencia de sus familias, son sólo salvajes que persiguen el caos y el enfrentamiento y les acusan, siempre les acusan, mientras miserablemente extorsionan y tratan de exprimir su trabajo.

Son los mismos que fuerzan comisiones ilegales entorno al 4%, aplicándolas sobre precios en los que dicen que no creen pero que curiosamente utilizan de referencia para exigir esas mismas negras comisiones. Descuentos sobre unos precios que ya están muy por debajo de los costes definidos por el propio Ministerio de Fomento.

Son los especuladores del sector, los que comen en la carroña, los que se alimentan del transportistas que vive pendiente de mantener su vehículo y seguir teniendo los ingresos necesarios para poder continuar tirando.

Ese orden y libre competencia de los que ellos hablan son palabras vacías que no tienen otro significado que el que les permite seguir abusando y evileciendo el sector, amenazando al transportista hasta el límite de su supervivencia, pero, eso sí, libre y ordenadamente. Es el mismo régimen que les permitirá renovaer su poder sobre otros más débiles cuando anteriores ya no sirvan a sus intereses.

Y su necesidad no tiene límites, su podrida honestidad y su supuesta bondad asquerosamente manchada les hará seguir dando lecciones con la exclusiva intención de mantener llenos sus bolsillos. Pero ellos quieren el orden y la libertad de competencia en el sector, quieren el orden dentro del desorden con el que tan bien les va, los demás sólo queremos poder sobrevivir.