GNV, la compañía de ferris del Grupo MSC, celebró ayer la entrega del GNV Polaris, el primero de los cuatro nuevos buques ro-pax que se integrarán progresivamente a su flota hasta 2026. Construido en los Astilleros Internacionales de Guangzhou (GSI) en China, el buque zarpará en los próximos días hacia Italia, donde se llevarán a cabo los trabajos de acondicionamiento para su entrada en servicio en enero de 2025.

A la tradicional ceremonia de entrega (Delivery) participaron representantes del astillero GSI y una delegación de miembros del Grupo MSC y de GNV.

Gracias a sus características técnicas, el GNV Polaris reforzará la red de rutas de la compañía de navegación, proporcionando una mayor flexibilidad operativa y una gestión más eficaz de los picos estacionales, especialmente en las rutas de Sicilia y Cerdeña. Este hito representa un paso clave en el proceso de renovación de la flota de GNV, que incluye no sólo la incorporación de nuevos barcos, sino también la modernización y reforma de los buques en servicio, además del desmantelamiento gradual de aquellos de menor rendimiento.

En palabras de Matteo Catani, director general de GNV: “La entrega de este buque representa un hito en la trayectoria de GNV, que marca el inicio de un ambicioso plan de modernización de nuestra flota. Este proyecto contempla la incorporación de nuevos ferris y la renovación de los existentes, lo que nos permitirá ofrecer al mercado un servicio de la más alta calidad en los próximos años. Con ello, reforzamos nuestra posición como operador de referencia en el Mediterráneo, comprometidos con la excelencia” . Y añade: “Este nuevo ferri también representa un avance fundamental para nuestra compañía en términos de reducción del impacto medioambiental de las operaciones. Gracias a sus altos estándares de eficiencia energética y a la posibilidad de utilizar planchado en frío, acelerará el camino que GNV ha emprendido hacia la sostenibilidad y en el que creemos firmemente. Como parte del Grupo MSC, aspiramos a ser actores clave en la reducción del impacto medioambiental de toda la industria”.

El nuevo GNV Polaris tendrá un tonelaje bruto de aproximadamente 46.000 toneladas, una eslora de 218 metros, una manga de 29,60 metros y podrá alcanzar una velocidad máxima de 25 nudos. Dispondrá de 239 camarotes y una capacidad de carga de 1.500 pasajeros y 3.100 metros lineales.

Al igual que las próximas nuevas unidades, este buque de GNV está equipado con instalaciones para el sistema de conexión eléctrica en frío, lo que permite conectarse directamente a la red eléctrica del puerto. Esta tecnología reduce significativamente las emisiones y mejora la calidad del aire, al tiempo que disminuye el ruido a nivel local.

Además, todos los nuevos buques de GNV estarán equipados con sistemas de depuración de gases de escape (EGCS) y reducción catalítica selectiva (SCR) para cumplir los requisitos de la normativa Tier III de la OMI (Organización Marítima Internacional). Asimismo, incorporan diversas "características de ahorro energético" a bordo, que incluyen: tecnologías de reciclado del calor mediante turboalternadores; uso de inversores para optimizar la carga eléctrica de bombas y ventiladores; uso de luces LED en todo el sistema de iluminación; y optimización de las formas del casco, los bulbos, la hélice y el timón. También aplican pintura de silicona en el casco para minimizar el consumo de combustible. para la propulsión.