El grupo naviero A. P. Moller - Maersk sigue adelante con su plan de renovación de flota con el que esperan recibir entre 50 y 60 buques con una capacidad global de 800.000 TEUs entre 2026 y 2030.

Así, la compañía está en proceso de firmar acuerdos de construcción y chárter de buques duales en cuanto a combustión que le permitirán mantener su objetivo de incorporar 160.000 TEUs nuevos de capacidad cada año.

“Nuestro programa de renovación de flota es fundamental para mantener la ventaja competitiva de nuestras actividades marítimas y es la piedra angular de la descarbonización de nuestras operaciones”, afirmó el director de Operaciones de Maersk, Rabab Boulous.

Con estos pedidos, la compañía se asegurará “un flujo estable de capacidad necesaria” para el periodo 2026 - 2030, con navíos en propiedad y también fletados, que permitirán a Maersk mantener “una flexibilidad financiera y operativa sólida, al tiempo que seguirán siendo dueños de una parte significativa de su tonelaje estratégico”.

Los barcos, que tendrán tamaños diferentes para ofrecer más opciones a su red de rutas, se alinean con los compromisos medioambientales del grupo danés, de ahí que sean de combustión dual, con el fin de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Los combustibles alternativos que podrán emplear estos buques serán metanol y gas natural licuados (GNL), aunque también se estudiarán otras posibilidades. Una vez que todos estos navíos sean entregados, cerca del 25% de las naves de Maersk estarán equipadas con motores duales.

“Estos buques no sólo aportarán capacidad y, con el tiempo, irán sustituyendo a barcos antiguos que han alcanzado el final de su vida útil para asegurar que mantenemos una flota de 4,3 millones de TEUs. Al diversificar nuestra flota y nuestras opciones de combustibles, logramos flexibilidad, conocimiento y experiencia para abordar un futuro ante el que se despliegan múltiples opciones en cuanto a carburante”, indicó el director de Alianzas Estratégicas de Maersk, Ahmed Hassan.