El grupo A. P. Moller - Maersk ha puesto en marcha un nuevo complejo logístico de 30.000 metros cuadrados en Tijuana (México) con el fin de facilitar los movimientos de mercancías a través de la frontera méxico-estadounidense.

Ubicado en el Pacífico Industrial Park en Tijuana, las instalaciones atenderán las necesidades de sectores como el tecnológico, el automovilístico, el minorista y el de lifestyle. Su localización estratégica sitúa el complejo cerca de puertos comerciales como el de Los Ángeles / Long Beach (Estados Unidos) y Ensenada (México).

El centro de almacenaje y distribución también se halla a 15 kilómetros de los puertos fronterizos de Otay y a 20 kilómetros del de San Ysidro.

Ofrecerá soluciones que incluirán la configuración de pedidos, el almacenaje, la gestión de transbordos, el control del inventario y otros servicios añadidos como el etiquetado y el empaquetado. Las instalaciones cuentan con el sello de arquitectura sostenible LEED Gold gracias a su instalación de paneles fotovoltaicos, la iluminación LED, la gestión de residuos y el sistema de reducción de consumo de agua.

La directora gerente de Maersk en México, Patricia Pérez Salazar, expresó el compromiso de la compañía por ofrecer “un servicio sin parangón” a sus clientes con este almacén nuevo, que ha sido “diseñado a la medida para atender las complejidades del tráfico transfronterizo” con soluciones logísticas “verdaderamente integradas”.

Destacó, además, que Tijuana se ha convertido en un hub clave del tráfico internacional por su cercanía con EE. UU.

En México, Maersk cuenta con una superficie de almacenaje de 150.000 metros cuadrados, con centros específicos en Ciudad de México, Tijuana y Cuautitlán y depósitos de mercancías en Lázaro Cárdenas y Manzanillo. Próximamente, tiene previsto expandir su presencia a Guadalajara y Monterrey.