La Conselleria de Justicia e Interior ha actualizado el Plan Especial frente al riesgo de transporte de mercancías peligrosas para adaptarlo a los cambios que se han ido produciendo en la gestión de este riesgo desde que se elaboró dicho protocolo en 1998 y, tras su última revisión, en 2011.

Según la Generalitat Valenciana, se trata de un plan “necesario”, pues es un territorio de tránsito de muchas mercancías peligrosas transportadas desde los polígonos industriales del norte de España y del Sur. También los puertos de la Comunitat Valenciana son importantes centros de recepción y distribución de mercancías peligrosas, informó el ente público.

Y es que, de acuerdo con sus estadísticas, en la Comunitat se producen una media de nueve accidentes al año en el transporte de este tipo de cargas, un número que se ha reducido casi a la mitad en la segunda década de los años 2000, dado que en la primera la media de estos siniestros ascendía a catorce.

Además, más de la mitad de los accidentes -el 53%- suceden en la provincia de Valencia y el resto se reparten entre Alicante y Castellón (25’7 y 21’3%, respectivamente). En concreto, el 40% ocurre en las autovías A7/AP7 y A3, así como en las carreteras nacionales N340 y N332.

Esta última, la carretera que une Valencia con la ciudad almeriense de Vera, es, de hecho, la que mayor siniestralidad registra en este tipo de vías con un 31% de los accidentes.

La nueva edición del plan incorpora la actualización de datos estadísticos que se han producido hasta diciembre de 2022 y de las vías de comunicación actuales por las que se transportan mercancías peligrosas en la Comunitat Valenciana. El plan incluye además mejoras de cartografía, especialmente en las capitales.