El Consejo de Ministros, en su reunión de ayer tal y como adelantó el ministro Óscar Puente la semana pasada, ha autorizado al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible a licitar las obras de la Autovía del Duero A-11 entre Langa de Duero y Aranda de Duero, en las provincias de Burgos y Soria, con un valor estimado de 175 millones de euros (IVA no incluido).

La Autovía del Duero vertebrará los movimientos de la mitad norte de la península en dirección este – oeste. Actualmente se están desarrollando proyectos y obras de construcción en distintos tramos, pero cuenta con algunos tramos ya abiertos al tráfico. Una vez finalizada, conectará Soria con Valladolid y Zamora y continuará hasta la frontera con Portugal que, dentro de la Red de Carreteras del Estado Portugués continuará a través de la autovía A-4 portuguesa hasta Oporto siguiendo igualmente el recorrido del río Duero.

El objeto de las obras que ahora autoriza el Gobierno es proporcionar continuidad al corredor de la Autovía del Duero A-11 entre las localidades de Langa de Duero y Aranda de Duero, corredor que actualmente tiene en servicio los tramos contiguos al ahora proyectado.

Este proyecto supondrá un nuevo impulso para el desarrollo de la A-11, eje del que se llevan puestos en servicio en Soria 55 km desde 2019, tras la finalización del tramo El Burgo de Osma-San Esteban de Gormaz el pasado mes de julio.

Características técnicas
El tramo de la A-11 Langa de Duero-Aranda de Duero se inserta entre dos tramos en servicio de la autovía: la variante de Aranda de Duero y el tramo entre Langa de Duero y San Esteban de Gormaz.

El inicio del trazado se localiza en el término de Langa de Duero, que conecta con el final del tramo San Esteban de Gormaz (oeste) – Variante de Langa de Duero de la A-11.

El nuevo trazado discurre en general en forma de variante de la actual N-122 y, con una longitud aproximada de 22,3 km, finaliza en el término municipal de Fresnillo de las Dueñas, en su conexión con el tramo de la Variante de Aranda del Duero de la A-11.

El nuevo tramo de autovía se diseña con dos carriles de 3,5 m por calzada, arcenes exteriores de 2,5 metros, interiores de 1 metro y mediana de 10 metros.

A lo largo del trazado de la autovía se prevén los siguientes enlaces:
Enlace de Langa de Duero Centro, conectando con la carretera provincial SO-P-5001.

Semienlace de Langa de Duero Oeste, que permite la conexión de la calzada decreciente de la autovía A-11 (dirección San Esteban de Gormaz) con la N-122, y de la N-122 con la calzada creciente de la A-11 (dirección Aranda de Duero).

Enlace de Zuzones – La Vid, que conecta con la carretera BU-923.

Enlace de Vadocondes (p.k. 28+350), que conecta con la carretera BU-930.
Debe destacarse también la presencia del Área de Servicio y Descanso de Valladar, estando prevista la ejecución de sendas explanaciones en ambas márgenes del tronco proyectado.

La autovía garantizará la permeabilidad transversal pertinente para los caminos y carreteras afectadas, que se repondrán respetando en lo posible su trazado original, estando previstos más de 30 pasos superiores e inferiores de nueva ejecución. Deben destacarse por su entidad, el viaducto previsto en el semienlace de Langa de Duero, el viaducto sobre el río Duero ( 250 m de longitud) y el paso superior de la carretera N-122 sobre el tronco de autovía.