La naviera Nippon Yusen Kabushiki Kaisha (NYK) y los astilleros Mitsubishi Shipbuilding, que forman parte del grupo Mitsubishi Heavy Industries, han recibido la autorización inicial de la sociedad japonesa de clasificación ClassNK para el desarrollo de un buque diseñado para el movimiento de amoníaco y de dióxido de carbono licuado (LCO2).

El 'Approval in Principle' (AiP) determina que ClassNK ha revisado el diseño básico de la nave y confirma que cumple con los requisitos técnicos y con los estándares de seguridad necesarios.

Ambas compañías llevan tiempo colaborando en el diseño y desarrollo tecnológico de este tipo de naves. Ahora, al obtener esta autorización, aplicarán “su conocimiento acumulado en amoníaco y LCO2 para favorecer el transporte rentable y seguro” de ambas materias primas en un mismo navío.

En concreto, el barco transportaría amoníaco hasta plantas termales en el trayecto de ida y regresaría cargado con el CO2 emitido por esas instalaciones industriales hasta sus puntos de almacenaje.

Desde NYK, destacaron que los barcos especializados en el transporte de LCO2 “desempeñan
un papel esencial como uno de los métodos de transporte más eficientes para mover CO2 licuado y capturado hasta puntos de almacenamientos e instalaciones de uso” en el marco de la cadena de valor del CO2, que busca contribuir a la descarbonización de la sociedad.

Por su parte, el amoníaco está despertando interés a escala internacional como “energía limpia de nueva generación que no emite CO2 durante su combustión”, agregaron.