El grupo Deutsche Bahn (DB) cosechó beneficios netos en 2022, tras dos años de números rojos como consecuencia de la pandemia de la Covid-19, con una cifra de 1.300 millones de dólares en ganancias.

Además, sus ingresos aumentaron un 19,1% hasta los 56.300 millones de dólares en relación con el año anterior, lo que supuso un récord financiero para la compañía.

Desde la compañía, destacaron que esas ganancias se lograron "a pesar de las consecuencias del impacto de la Covid-19 en el transporte de pasajeros, de la guerra en Ucrania y del auge de la inflación".

Así, atribuyeron los resultados positivos de 2022 a la demanda del transporte de pasajeros y al “éxito considerable” de su filial logística DB Schenker.

Récord
Con sus beneficios operativos, DB Schenker superó la cifra de 2021 en casi un 50%, alcanzado una cifra récord en su historia, con un total de 1.800 millones de dólares en ganancias, que contribuyeron a la rentabilidad del grupo.

“La movilidad respetuosa con el medio ambiente está en alza. La demanda es positiva y sigue creciendo con fuerza. Puede que batamos otro récord en 2023 con más de 150 millones de pasajeros en nuestros trenes de larga distancia. Eso nos anima a implementar mejoras lo más rápido posible para proporcionar al mercado alemán el sistema ferroviario eficiente y puntual que merece”, afirmó el director ejecutivo de Deutsche Bahn, Richard Lutz.

A pesar de que la división DB Cargo mejoró sus ingresos, generó una pérdida operativa de 600 millones de euros, como consecuencia de unas condiciones operativas complicadas y de unos costes mayores.

“La historia de DB Schenker es una historia de éxitos y la compañía cuenta con una posición sólida en todos los sectores relevantes para nuestra industria. Con el programa de transformación que DB Schenker lanzó en 2022, está marcando el camino para el crecimiento estable y continuo. DB Schenker tiene el potencial necesario para seguir arrojando resultados excelentes durante los próximos años”, sostuvo el director financiero del grupo, Levin Holle.

Para 2023, la compañía prevé cerrar el ejercicio fiscal con unos ingresos de 56 millones de euros y unas pérdidas operativas de alrededor de 1.000 millones de euros como consecuencia del elevado nivel de inflación y de la financiación de infraestructuras adicionales.