El estudio encargado por el Ayuntamiento de Sagunto a Ingeniería Sondeos, Estructuras y Geotecnia, S.L. (SEG) para evaluar la sostenibilidad y viabilidad del pantalán, cuya competencia es de la Autoridad Portuaria de València (APV), concluye que solo sería viable estructuralmente la rehabilitación de los primeros seis vanos en zona marítima, lo que equivale a 180 metros de longitud. También concluye que en caso de requerir un pantalán de mayor envergadura, "se deberá optar por la demolición del mismo y la ejecución de un pantalán de obra nueva". El informe añade que recomienda que la cota de rasante sea elevada respecto al nivel del mar en mayor medida que la actual.

Dos temporales destruyeron la estructura en 2019 y 2020

Esta es una de las conclusiones importantes del estudio que el alcalde de Sagunto, Darío Moreno, acompañado de los concejales del Equipo de Gobierno, Asun Moll y Roberto Rovira, ha presentado a las asociaciones que trabajan por el patrimonio industrial de la ciudad.

La Autoridad Portuaria de Valéncia ya anunció que la ejecución de un nuevo pantalán era la única vía factible para solventar este problema, teniendo en cuenta las situaciones climatológicas que estamos viviendo a raíz del cambio climático, pero - según el alcalde de Sagunto, Darío Moreno- “sí que hay una parte que se podría restaurar y rehabilitar. Por lo tanto, esta opción la queríamos comentar con las asociaciones de patrimonio industrial para conocer cuál es su perspectiva una vez conocido también este informe. A partir de aquí intentaremos buscar el máximo consenso con todos los partidos, también con el tejido asociativo para plantear y exigir a la Autoridad Portuaria de Valencia un proyecto que permita poner en valor nuestro pasado industrial y nuestra historia"., ha añadido Moreno.

Según el estudio, el pantalán tiene una longitud de 1.652 metros y lo dividen en cinco tramos.

De estos tramos, el primero, con 360 metros de largo, está ubicado en tierra firme y el resto, sobre el mar.

Dos tramos del pantalán se derrumbaron durante los temporales de 2019 y 2020. Más tarde, la Autoridad Portuaria de València publicó que no se podía rehabilitar y que habría que demolerlo y construir uno de menor longitud.