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Sábado, 30 de noviembre de 2024


El calzado busca incentivos fiscales y financiación para potenciar su innovación
VM, 10/09/2019

El calzado de la Comunidad Valenciana apuesta por potenciar acciones centradas en investigación, desarrollo e innovación para mantener su competitividad en los mercados. Con el objetivo de favorecer que las empresas del sector puedan poner en marcha proyectos centrados en estas áreas se ha organizado hoy una jornada sobre incentivos fiscales y financiación, tanto nacional como europea, para la I+D+i. El encuentro ha sido promovido por la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal) y Desinope 323.

La sesión de trabajo ha sido impartida por el portavoz de Industria del Grupo Popular en las Cortes Valencianas, Felipe Carrasco, quien ha recordado que en líneas generales las deducciones fiscales para I+D+i pueden suponer “entre el 12% y el 42% de deducción sobre el gasto del proyecto”. En función del proyecto que la empresa desea acometer se puede acoger a un porcentaje menor o mayor.

Carrasco ha incidido en que este incentivo fiscal dedicado a la innovación de las pymes no suele ser una herramienta muy utilizada por ellas, por lo que resulta importante “difundir la existencia de estos apoyos para las pymes y los sectores productivos valencianos” en este tipo de jornadas informativas. Durante su ponencia ha profundizado en las tres formas en las que las pymes pueden optar a estos apoyos fiscales y en cuáles son los trámites que hay que seguir para ello.

En relación con el papel de la innovación dentro de la industria, el portavoz de Industria del Grupo Popular ha señalado que la “innovación es uno de los pilares básicos si queremos ser competitivos” y que “el calzado es una industria puntera que lleva muchos años innovando, y que busca fortalecer las acciones que están haciendo”.

Por otro lado, el director de Desinope 323, Enrique Montiel, ha puesto durante su intervención en valor estos incentivos fiscales, ya que permiten “el retorno a las empresas de los impuestos que están pagando”. Para Montiel, estos apoyos son “instrumentos muy ágiles y más eficientes en la gestión y en los plazos, y además no hay concurrencia competitiva como en los programas de subvenciones”.